"El pensamiento crítico es lo contrario de la fe."En primer lugar, me ha resultado esclarecedor que se oponga pensamiento crítico y fe. ¿Es que no se puede tener fe y pensamiento crítico a la vez? ¡Por supuesto que sí! Esta afirmación podría ser cierta si se añade un adjetivo a fe: "El pensamiento crítico es lo contrario de la fe ciega". ¡Ahí si que puedo estar de acuerdo!
Otra de las cosas que llama la atención es el hecho de usar la palabra fe en contextos que no tienen nada que ver con la religión. Fuera del contexto en el que debería utilizarse la palabra pierde su sentido, se la despoja de su trascendencia. Con la palabra fe ha pasado algo muy parecido a lo que ha sucedido con la palabra religión: ha perdido su significado original, se ha aplicado en contextos que poco o nada tienen que ver con lo religioso, con lo trascendente, y eso hace que exista una gran confusión sobre lo que significan realmente.
La fe es mucho más que confianza ciega en algo o en alguien, es el motor de una vida vivida con sentido. Y por supuesto, en esta vida es fundamental ejercer el pensamiento crítico frente a la saturación de información que recibimos continuamente desde todas partes. ¡En absoluto están contrapuestos fe y pensamiento crítico! La fe debe ser razonada y acorde al pensamiento lógico. La fe irracional y la fe ciega son hermanas gemelas.
Fe y creencia también se han confundido demasiadas veces. Puedo creer en la existencia de fenómenos paranormales aunque no haya experimentado ninguno, pero ¿a que sería absurdo que tuviera fe en los fenómenos paranormales? Tal como lo veo, la creencia es un mero asentimiento intelectual a ciertas afirmaciones; la fe es algo más profundo que eso; en cualquier caso es una creencia que sirve de motor a nuestra vida y a nuestras acciones. Si la fe no nos impulsa a vivir una vida plena y con sentido, es que no es fe: es una mera creencia que hemos aceptado por obediencia a la autoridad, por comodidad o por cualquier otro motivo mundano.
Vivamos la vida con pensamiento crítico, pero también con fe. Ambos dependen de nosotros y tenemos todas las herramientas necesarias para ejercerlos.